La excavadora móvil Bagger 288 con unas dimensiones monstruosas de 220 metros de largo, 96 metros de alto y 46 metros de ancho, puede excavar al día 240.000 toneladas de material, el equivalente a un campo de fútbol de 30 metros de profundidad.
Comenzó a construirse en 1973 por la empresa alemana Krupp, actualmente conocida como Thyssen Krupp y fue terminada cinco años mas tarde con un coste total de 100 millones de dolares.
Construida para la extracción de carbón en la mina Tegebau Hambach en Alemania, para la mayor proveedora energetica del pais RWE Power AG.
Esta monstruosidad pesa 13.500 toneladas y puede alcanzar una velocidad máxima de 0.6 km/h, lo consigue gracias a 12 juegos de orugas pesadas de 3.8 metros de ancho cada una alimentadas por corriente eléctrica.
La pala giratoria principal se encarga de recoger los materiales que serán tratados para la extracción del carbón, tiene 18 cangilones y 21.6 metros de diámetro. Gira a un máximo de 48 rpm y cada pala recolecta 6.6 toneladas de material.
La excavadora Bagger 288 no tiene una fuente de alimentación interna, se alimenta por corriente alterna a través de kilómetros de cable. La maquina desarrolla una potencia de 22.190 CV, de los cuales 4.504 CV salen de los cuatro motores que accionan la cabeza excavadora.
El 21 de febrero de 2001, la excavadora Bagger 288 completó su trabajo en la mina Tegebau Hambach y dejo de ser útil. Fué entonces cuando tuvo que desplazarse a la mina Garzweiler, situada a 22 kilómetros, cruzando la autopista Autobahn 61, el rio Erft, una linea de tren y varias carreteras. El traslado costó 15 millones de marcos alemanes y aun así la opción mas económica.
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